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Desolados, manifestantes toman las calles por Breonna Taylor

Los agentes que dispararon y mataron a la joven afroestadounidense en su departamento en marzo durante una redada antidroga nocturna no serán acusados por su asesinato





25 de Septiembre de 2020 a las 09:33 hrs -- Centinela Digital
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Algunos levantaron el puño en alto gritando 'Black lives matter!''. Otros dejaron cartas, flores y carteles en una plaza en el centro de Louisville. Pero todos dijeron su nombre: Breonna Taylor.

La gente, consternada porque los agentes que dispararon y mataron a la joven afroestadounidense en su departamento en marzo durante una redada antidroga nocturna no serán acusados por su asesinato, prometieron el jueves no desistir en su lucha por la justicia. La gran pregunta para una ciudad destrozada por la muerte de Taylor y por el problema más amplio del racismo en Estados Unidos es cómo seguir adelante.

Muchos volvieron a salir a la calle, como en varias ciudades estadounidenses, reclamando reformas para combatir el racismo en la policía.

Tenemos que asumir que la ley no nos protegerá, pueden matarnos y salirse con la suya", dijo Lavel White, un afroestadounidense habitual en las protestas en el centro de Louisville. Participó en la del jueves en la noche porque estaba devastado por la decisión de un jurado investigador en la víspera de no acusar a los agentes.


Si no podemos hacer justicia para Breonna Taylor, ¿cómo podremos lograrla para otros?''.

Estaba enojado porque la policía llevaba equipos antimotines mientras los manifestantes protestaban de forma pacífica por las calles del centro después del toque de queda a medianoche. Las movilizaciones se repitieron en lugares como Filadelfia y Nueva York, un día después de que la violencia empañó algunas de marchas, incluyendo una balacera en la que dos agentes de Louisville resultaron heridos.

El jueves por la noche, un auto atropelló a una multitud que protestaba contra la brutalidad policial en Los Ángeles, hiriendo a al menos una persona. En Portland, Oregon, donde las protestas son habituales desde la muerte de George Floyd en Minneapolis en mayo, se prendió fuego al edificio de un sindicato policial.

Taylor, una mujer negra que trabajaba en los servicios de emergencias médicas, recibió varios tiros de agentes blancos luego de que su novio les disparase, según las autoridades. El hombre dijo que no sabía quién estaba entrando a su casa y que abrió fuego en defensa propia, hiriendo a uno de los policías. Las autoridades entraron a la casa con una orden relacionada con un sospechoso que no vivía allí, y no se encontraron drogas en el interior.

El fiscal del estado, Daniel Cameron, dijo el miércoles que la investigación mostró que los agentes actuaron en defensa propia. Un policía que ya había sido despedido fue acusado por disparar contra el departamento de un vecino.

El FBI sigue investigando si se vulneraron los derechos civiles de Taylor. Pero las pruebas para este tipo de casos son muy elevadas, y la fiscalía tiene que demostrar que los agentes sabían que estaban actuando de forma ilegal y que tomaron la decisión deliberada de causar la muerte a una tercera persona.

(Excélsior)