El juego entre los Cardinals de Saint Louis y los Mets de Nueva York en el Citi Field de Nueva York tuvo una acción dramática luego de que uno de los umpires sufrió un brutal pelotazo que provocó que cayera al suelo con el rostro ensangrentado.

Fue en la segunda entrada cuando Edmundo Sosa, shortstop de los Cardinals cortó un batazo de Kevin Pillar y de inmediato giro para lanzar e intentar hacer el out en primera base, pero la dirección de la pelora fue errónea y así fue como golpeó la cara del umpire.

Al recibir el golpe, de inmediato se llevó la mano al rostro y caerse. La preocupación del panameño se notó cuando se acercó con el oficial para saber su estado de salud, que por fortuna no necesitó de mayor asistencia después de recibir un breve chequeo médico.

(El universal)