De un año a la fecha han surgido nuevas drogas, como las llamadas drogas musicales, que son fichas o sonidos descargables que se venden en distintas páginas web, a precios que van de los 300 a los 600 pesos por cada archivo.

El Centro de Integración Juvenil reportó que este tipo de sonidos llegan a provocar alucinaciones, ataques epilépticos o crisis convulsivas entre quienes las utilizan, y a largo plazo provocan sordera.

Se trata de frecuencias sonoras que ofrecen distintas sensaciones, y llevan nombres sugerentes para atraer más clientes.

Algunas de éstas son el “efecto mariguana”, “happy cocaína” “alcohol, o “sleeping angel diazepam”, y cada una produce sensaciones similares al tipo de sustancia que se emula mediante sonidos que estimulan al cerebro.

Aunque comenzaron a utilizarse en Europa, fue en Estados Unidos donde estas drogas tomaron auge y comenzaron a volverse más populares entre adolescentes y jóvenes principalmente, quienes de la mano con la tecnología deseaban experimentar nuevas formas para cambiar su realidad.

En algunas páginas en las que se ofertan las drogas, y testimonios de quienes las han escuchado, se asegura que quien las escucha llega a vivir las peores pesadillas o a lograr un estado de calma y pasividad en el que puedan olvidarse de su realidad.

Algunos de los sitios donde ya se pueden ver las experiencias que viven quienes escuchan este tipo de sonidos son YouTube, sitio en el que se pueden ver videos de jóvenes que experimentan con estas nuevas drogas y en la mayoría de los casos se les observa con los ojos cerrados, sentados o acostados con audífonos.

Estas pistas están hechas por medio de dosis numéricas, que son pulsaciones auriculares relacionadas con la emisión de sonidos similares en cada oído, pero con frecuencias diferentes, y esto origina una alteración de las ondas cerebrales, por lo que para su uso se requiere de audífonos con alta definición.

Dichas secuencias provocan un fenómeno neurológico, o como ha sido definido por quienes estudian este “producto”, provocan una especie de hipnosis sonora, y ésta termina cuando el sonido deja de escucharse.

LAS DROGAS MUSICALES MÁS VENDIDAS

*Shot Alcohol: Escuchar la dosis Alcohol equivale a beber cinco vasos de ginebra puro. Sus efectos son muy fuertes, aunque desaparecen rápido, llevando al consumidor a un estado de relajación, alegría y sobreexcitación, pero sin resaca.

*Efecto mariguana: Este audio, reproduce en mayor medida, después de varios minutos de escucharla, los efectos de la mariguana en el cuerpo, la persona puede caer en una relajación extrema.

*Content: Promete ser un sedante moderado. Según la descripción de sus creadores, calma, brinda energía, pone una sonrisa en quien lo escucha y le hace sentir bien durante un tiempo, además de eliminar la negatividad de la mente.

*Sleeping Angel: Se trata de un sedante pero mucho más fuerte que el Content, por lo que se le conoce como el Diazepam virtual. Sleeping Angel promete llevar al estado de consciencia hasta la fase Delta de sueño, pasando por el estado Theta, ofreciendo un descanso hipnótico y reparador.



Pueden ser mortales: CIJ

"Las llamadas drogas auditivas hacen creer a las personas que no tendrán consecuencias, pero se puede poner en riesgo la vida, pues las frecuencias llegan a desarrollar una crisis epiléptica o estado convulsivo, según los estudios que se han hecho sobre estas drogas”, advirtió el director del Centro de Integración Juvenil en Chihuahua, Ramiro Vélez Sagarnaga.

Señaló que hace aproximadamente unos cuatro años que estas drogas se pusieron de moda, primero comenzaron en Europa y posteriormente en Estados Unidos pero a la fecha es una moda que se ha extendido en México.

“Los estudios que se han hecho sobre éstas muestran que una persona que no ha tenido circunstancias previas de uso de drogas pueden no tener el efecto, pues es la parte emocional la que se activa, por lo que posiblemente es necesario que existan circunstancias previas a su alrededor, y esto es lo que va a generar un estado similar al de la intoxicación, “esto es porque la persona se mentalizó para que así ocurriera”.

Desafortunadamente, dijo, existen frecuencias que son archivos descargables que se dice al oírlas la persona experimentará lo mismo que al consumir drogas alucinógenas como el LSD, la mariguana, hongos, entre otras, “los estudios muestran que son ondas de frecuencias que no llegan como tal a despertar realmente el área del circuito de la adicción”.

(El Heraldo de Chihuahua)