Desde temprano se pudieron apreciar estas flores color lila y rosa en la placa de Marisela Escobedo.
Esta mujer fue enfermera y se convirtió en activista tras el asesinato de su hija, Rubí Marisol Frayre, quien fue asesinada en el 2008 a manos de su pareja y padre de su hija, Sergio Rafael Barraza.
Tras esto, Marisela Escobedo, emprendió una búsqueda en diferentes puntos de este país, con sus propios recursos, y no se detuvo hasta dar con el asesino de su hija.
Lamentablemente esta madre fue asesinada afuera de las instalaciones de Palacio de Gobierno, y hasta la fecha no ha habido justicia por el caso de su hija.