No hay fórmulas para el éxito, pero sí la conjunción de elementos clave que hacen que un proyecto se vuelva afortunado. Nadie nos va a extrañar tiene esa característica, una historia honesta, hecha con el corazón, que despierta la nostalgia, y al mismo tiempo une generaciones. En los años noventa, un grupo de adolescentes trafica con tareas, mientras enfrenta los problemas propios de la edad; y con ellos, vemos a un país de cambio, convulso.
“Se me pone chinita la piel de pensar en la respuesta que ha tenido el público, el cómo han conectado con la serie, creo que tiene que ver con la universalidad de los temas, no es una serie que solo provoque nostalgia por los noventa, los personajes son entrañables, el elenco ha sido muy generoso y eso es algo que el público abraza y entiende”, agregó Kishi, sobre la comedia mexicana que, desde hace unos días, se convirtió en la más vista de Prime Video.
(Milenio)