El alto el fuego, negociado por Estados Unidos, entró en vigor el 24 de junio y se ha mantenido estable hasta ahora. En Israel se reportaron oficialmente 28 fallecidos durante la ofensiva.
El evento se organizó como acto municipal para evadir la prohibición oficial basada en una ley que restringe manifestaciones públicas por supuestamente afectar el “desarrollo adecuado” de menores.
Trump acusó a Canadá de “un ataque directo y flagrante” contra Estados Unidos y advirtió que en los próximos siete días impondrá aranceles a productos canadienses.
La decisión marcaría una crisis existencial que podría llevar a la marginalización o disolución de la OEA.
La decisión, con mayoría conservadora de 6 a 3, no aborda el fondo del decreto, sino la autoridad de los jueces federales para bloquearlo a nivel nacional.
El principal sospechoso, un austriaco de origen macedonio del norte, fue detenido y confesó los hechos, aunque luego se retractó.
La UE advirtió que la situación “empeora rápidamente” con un aumento de ataques, destrucción de propiedades y desplazamientos forzados.
Las declaraciones llegan tras el alto el fuego entre Irán e Israel, mediado por Trump y Catar. Además, Netanyahu pidió aplazar su juicio por corrupción por motivos de seguridad nacional.
En un mensaje televisado, afirmó que los ataques estadounidenses a instalaciones nucleares iraníes no lograron “nada significativo” y acusó a Trump de exagerar los hechos.
Pese a las tensiones, Sánchez aseguró que la cumbre fue un éxito y reafirmó el compromiso de España con la seguridad colectiva.