La historia empieza con la estrella en Hollywood Boulevard de una gran actriz convertida en personaje de la televisión matutina, Elizabeth Sparkle (Demi Moore). Tras una carrera llena de éxitos, las puertas se le cierran por completo de manera cruel y despiadada, por el hecho de que tiene más de 50 años. En sí, esta es una historia de horror con la que la mayoría de las mujeres nos identificamos; lo que pasa cuando trata de resolver el tema, con medidas más que extremas, es cosa de las pesadillas más creativas con las que podríamos enfrentarnos.
Así inicia la plática con la directora Coralie Fargeat: “Para mí era algo muy importante que tenía dentro de mí y que quería liberar y darle al mundo; fue una forma muy empoderadora y liberadora de llevar este mensaje. La realidad todavía está haciendo demasiadas cosas a las mujeres, y estoy muy feliz de que este mensaje se difunda en el planeta”.
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