Podríamos hablar de los primeros 163 millones de dólares que Wicked recaudó en su primer fin de semana. Pero en el momento que apareció ante nosotros Jon M. Chu, con una enorme sonrisa y con la más generosa actitud de compartir lo que ocurrió con esta historia de las brujas de Oz, las emociones se desbordaron mucho más allá que los simples números de taquilla.
"Siempre he sido fan. He estado esperando este filme por 20 años. Y me siento muy afortunado y bendecido de ser parte de él y de liderar este grupo de talentos increíbles. Después de este fin de semana, finalmente pude solo gozarlo, ¡qué alegría! Pude respirar de nuevo y disfrutar. La mejor parte fue ver a los espectadores llorar, reír, bailar y volver a reír".
"Eso es por lo que amamos tanto las películas. Esas son las cintas que me encantaron desde que nací, es genial saber que el cine sigue viviendo de esa manera".
(milenio)