La coronación del rey Carlos III el año pasado costó a los contribuyentes británicos 72 millones de libras (90.6 millones de dólares), según las cifras oficiales publicadas el jueves.
En tiempos de ajustes presupuestarios, la monarquía está recibiendo cada vez más críticas por sus gastos que muchos ciudadanos consideran desconectados de la realidad.
(milenio)