El canciller Juan Ramón de la Fuente negó que los migrantes mexicanos deportados desde EE.UU. lleguen esposados a México, como afirmó la gobernadora de Morelos, Margarita González Saravia.
De la Fuente rechazó cualquier maltrato y aseguró que los deportados reciben apoyo y asesoría legal del Gobierno de México, siendo recibidos con dignidad y cariño.
También señaló que las cifras de mexicanos en la frontera con EE.UU. no han aumentado significativamente y que están preparados para posibles incrementos.
La presidenta Claudia Sheinbaum mencionó que se investigarían casos de violaciones a derechos humanos, aunque hasta ahora solo se han reportado dos incidentes.
-EFE-