El presidente de Argentina, Javier Milei, nombró por decreto a Manuel García-Mansilla y Ariel Lijo como jueces del Tribunal Supremo, a pesar de no haber recibido el apoyo necesario del Senado el año pasado.


La decisión se tomó mientras el Congreso está en receso, y los jueces fueron designados "en comisión" hasta el próximo período legislativo. Milei justificó su acción argumentando que el Tribunal no puede operar adecuadamente con solo tres jueces.

Además, defendió la decisión señalando que el Senado no tiene la potestad de rechazar los nombramientos por razones personales o políticas.

-EUROPA PRESS-