El IMSS no surtió 4.5 millones de recetas en 2024, lo que equivale a 11.5 millones de medicamentos no entregados. Aunque esta cifra es una mejora respecto a años anteriores, sigue siendo alta comparada con los niveles previos al 2019. Durante la pandemia, el desabasto alcanzó 50 millones de recetas no surtidas.
El IMSS-Bienestar reportó 7,296 recetas sin surtir en cinco meses, y las Fuerzas Armadas dejaron de entregar más de un millón de recetas. A pesar de los esfuerzos para mejorar, el desabasto continúa afectando a hospitales públicos, especialmente en medicamentos oncológicos, para diabetes e hipertensión.
Cero Desabasto advierte que en 2025 el problema podría empeorar, con más reportes de médicos sobre falta de insumos.
-EL UNIVERSAL-