Las tensiones entre Colombia y Estados Unidos llegaron a su punto más alto en décadas, luego de que el presidente Gustavo Petro denunciara una “amenaza de invasión” por parte del gobierno de Donald Trump.
El mandatario estadounidense anunció el fin de la ayuda financiera a Colombia y calificó a Petro como “líder narcotraficante”, advirtiendo que si el país no elimina los narcocultivos, “Estados Unidos lo hará, y no de buena forma”.
Ante esto, Bogotá llamó a consultas a su embajador en Washington y analiza medidas diplomáticas.
El ministro del Interior, Armando Benedetti, calificó las declaraciones como una amenaza militar directa a la soberanía colombiana.
-EFE-