En 2024, Europa y Asia Central reportaron más de 127,000 casos de sarampión, el doble que el año anterior y el nivel más alto en más de 25 años, según la OMS y UNICEF.
La principal causa de este resurgimiento es la baja cobertura de vacunación, exacerbada por la pandemia de COVID-19 y la desinformación sobre las vacunas.
De los casos registrados, el 70% requirió hospitalización y el 40% afectó a niños menores de cinco años. Rumanía, Kazajistán, Rusia y Azerbaiyán fueron los países más afectados. OMS y UNICEF alertan que el sarampión sigue siendo un virus altamente contagioso que puede causar complicaciones graves, como neumonía y encefalitis.
-EFE-