La llegada de la nueva variante de mpox, antes llamada viruela del mono, a Europa es una clara muestra de que contener la propagación de esta enfermedad requerirá una respuesta internacional unificada, dijo la Organización Mundial de la Salud, que pidió no caer en el pánico.
Alentó a todos los países a mejorar la vigilancia, a compartir los datos que tengan y a trabajar para comprender mejor la transmisión, así como a compartir las vacunas que tengan.
Un segundo tipo de vacunas fueron producidas por encargo de Japón, pero no han sido comercializadas, y la OMS espera que este país también pueda compartirlas para prevenir una posible pandemia de esta nueva variante.
-EFE.